Dos mujeres nos miran directamente desde un sofá, sus cuerpos muy juntos, las piernas entrecruzadas. Una está sentada, la otra tendida con la cabeza colgando del borde. La imagen destila una sensualidad juguetona, realzada por el despliegue de hombros, vientres y pechos al descubierto, las poses contorsionadas, las extremidades enlazadas y las formas fálicas bajo el sofá. Los cuerpos femeninos reclinados recuerdan precedentes de la historia del arte, como la
Venus de Urbino de Tiziano, pintura renacentista de 1538. Pero si bien la Venus se muestra pasiva, la mirada resuelta de April y June transmite empoderamiento y control.
David Antonio Cruz explora en sus pinturas y performances la visibilidad y la interseccionalidad de los cuerpos queer negros y morenos. Esta obra es parte de su serie regresodeloschicossucios, donde presenta jóvenes activistas queer, así como hombres y mujeres de su comunidad que se identifican con lo queer.