Finalist
Los años que ha pasado estudiando el realismo clásico, dos de ellos en la Liga de Estudiantes de Arte de Nueva York, han dado a Kelly Carmody una envidiable capacidad de invocar referencias a Diego Velásquez, Jean-Baptiste-Siméon Chardin y otros maestros europeos. No obstante, sus pinturas—minúsculas naturalezas muertas y retratos de cuerpo entero—son claramente contemporáneas; en ellas fusiona lo tradicional con lo cotidiano y una dosis de humor. La mirada de soslayo de su modelo (una colega artista en un programa de residencia en una granja de Nueva York), el pesado guante de trabajo y el gallo con sus patas colgantes color hueso crean un sentido de inmediatez y humor. Carmody señala: “Con la ayuda de los granjeros, trabajamos de noche, cuando el gallo era más dócil. Fue un modelo estupendo”.